“La tierra no tenía entonces ninguna forma; todo era un mar profundo cubierto de Oscuridad, y el espíritu de Dios se movía sobre el agua. Entonces Dios dijo: ¡Que haya luz!”
Génesis 1:2-3
Al leer el texto anterior la conclusión es sencilla: “Dios puede cambiar lo
invariable”. El lugar no tenía ninguna forma, era como un mar profundo, re-
pleto de oscuridad; pero cuando Dios llegó allí y su Espíritu se paseó sobre
éste, todo fue transformado... La luz llegó.
Puede que necesitemos que alguien ponga orden en nuestra vida y encien-
da la luz en nuestro corazón y caminar. Dios es especialista en eso, Él creó este mundo, lo ordenó, lo llenó con cosas hermosas, cuando antes solo había vacío y oscuridad.
Dios nos desafía a abrirle el corazón, no importa si hay oscuridad allí dentro, el Señor tiene luz y su Espíritu Santo para cambiar la historia, para transformar la vida de las personas. Hoy, es un día perfecto para adorar y decirle al Señor: “muévete en mi corazón, quita toda oscuridad y llénalo de tu luz…” si tenemos la disposición, Él comenzará a hacer cosas que no imaginábamos, cambiará lo invariable.
Recuerda:
Dios es un Dios creativo, Él da forma y pone luz en donde antes había desorden y oscuridad.
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