Valor y firmeza; parece grande el desafío, pero resulta que en muchas ocasiones tratamos de justificar nuestra debilidad y no nos damos cuenta que Dios sabe que tenemos la capacidad de ser valientes y queremos
“engañarlo”.
Aplicar la Palabra de Dios a nuestra vida requiere de valentía y firmeza, por supuesto que es difícil y complicado. Es un reto solo para valientes.
¿Somos capaces? Por supuesto, en nuestra debilidad y flaqueza Dios nos da fuerzas; Él sabe que podemos lograrlo. La bendición es para valientes ¿Estamos listos para recibirla?
Recuerda:
Demuestra tu valentía y firmeza aplicando la Palabra de Dios en tu vida.
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