“… Rezón se fue a Damasco y se estableció allí como rey. Fue enemigo de Israel mientras vivió Salomón, y esto se unió al daño que causaba Hadad, pues aborrecía a Israel”
1 Reyes 11:24-25
Hemos venido hablando acerca de la importancia de entregar completamente nuestro corazón al Señor, mencionamos que el gran conflicto de Salomón fue no haberse definido, nada fue suficiente para entregarse por completo. Esto trajo grandes conflictos para su reinado, para sus descendientes y para todo el pueblo, muchos enemigos se levantaron contra Israel y esperaban la oportunidad para destruir al pueblo de Dios.
Este pasaje me hace reflexionar que cuando mi corazón no le pertenece a Dios, estoy abriendo las puertas para que vengan muchas cosas negativas a mi vida y ojo porque podemos afectar a nuestra descendencia, nuestras familias y a todos los que nos rodean. ¿Así de trágico? Definitivamente si. Es un tema que debemos corregir HOY “Pero como eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca” eso dice Apocalipsis.
¿Alguna vez hemos soñado con ser usados grandemente por Dios? Tomemos en cuenta que no entregar nuestro corazón por completo al Señor, puede hacer que el Ministerio que se nos ha encomendado no de los frutos que debería dar.
Recuerda:
Mucho cuidado, aleja TODO peligro, TODA amenaza, entregándote por completo a Dios.
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