“Entonces el Señor lo llamó: ¡Samuel!¡Aquí estoy! Contestó él”
1 Samuel 3:4
Dios nos llama por nuestro nombre: Julio, José, Pedro, María, Celeste… no importa como nos llamemos SOMOS ÚTILES para el Reino de Dios.
Samuel era tan solo un muchacho sin experiencia, cuando escuchaba su nombre creía que Elí lo llamaba, pero el mismo Dios era quien estaba mencionando el nombre de Samuel.
Este jovencito en su ignorancia tuvo la respuesta correcta: ¡Aquí estoy! Tú y yo no desconocemos de donde viene el llamado, sabemos que el mismo Dios susurra nuestro nombre ¿Estamos listos para decir aquí estoy? Esa respuesta y esa actitud pueden darle hoy un giro completo a nuestra vida, a nuestra eternidad.
Recuerda:
Tu llamado es personal ¿Estás listo para decir ¡Aquí estoy!?
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