“Entonces el Señor le dijo a Moisés: Voy a hacer que les llueva comida del cielo”
Éxodo 16:4a

He escuchado en muchas ocasiones que las personas dicen con cierta iro-
nía: “Es que las cosas no caen del cielo”… El pueblo de Israel necesitaba
comida en el desierto y sorprendentemente la comida les cayó del cielo, no en una ocasión, sino que era algo de todos los días.
Aunque parezca imposible e increíble esto sucedió. ¿Qué nos enseña? Dios
puede obrar en donde parece que no hay esperanza, Él es capaz de pro-
veer y de bendecir a sus hijos con todo lo que necesitan ¿Tenemos nuestra
confianza puesta en Dios? Si es así, mira al cielo y pide al dueño de todo,
Él sabrá enviarte lo que necesitas.

Recuerda:
Dios es fiel con su pueblo; muchos dicen: las cosas no caen del cielo, pero Dios te bendice desde allá.