“Yo soy el Dios todopoderoso; ten muchos hijos y descendientes. De ti saldrá una nación y mucho pueblos, y entre tus descendientes habrán reyes”
Génesis 35:11
Tenemos un Dios maravilloso, este texto es testimonio de ello; Dios le da a Jacob promesas de prosperidad y de bendición. ¿A alguno de nosotros le gustaría bendición de esa manera? Seguramente a todos. Le asegura que sus generaciones serán benditas, no serán cualquiera: “SERÁN REYES”.
Dios puede bendecirnos de maneras que no imaginamos, en muchas ocasiones estamos esperando que Dios nos bendiga y pensamos que es como cerrar un trato con Él; Yo te sigo, pero tú me bendices... El Señor no espera tal cosa de nosotros.
Jacob no sólo amaba a Dios, sino que también estuvo dispuesto a luchar por la bendición. ¿Qué estamos dispuestos a hacer nosotros? No te asustes Dios sólo pide que lo amemos, que tengamos oídos para sus mandamientos y un corazón para obedecerle. Las bendiciones esperan por nosotros.
Recuerda:
Bendición y prosperidad esperan por ti, y para tus generaciones, ¿El precio? Tu obediencia.
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